Operación bolita y cura detox postvacacional ¿...?

¡Operación bolita! Este es el nombre con el que ha bautizado una paciente a coger peso en vacaciones. Por cierto, ¿qué tal las vacaciones? ¿Disfutadas? Espero que sí. Y ahora, otra vez, vuelta a la rutina.

Vacaciones y verano. Qué fácil resulta ganar peso a nada que bajamos un poco la guardia, y ¡qué rabia da!

Y qué atractiva y fácil se nos presenta una «cura detox postvacacional» ¿…? Aquí os dejo un artículo de prensa en el que varios profesionales de la nutrición hablan sobre los «zumos detox» tan de moda en esta época y tras las navidades: «Los zumos detox no te redimirán de los excesos cometidos en verano». Esos batidos, zumos, smoothies, con esos colores tan bonitos y llamativos: rojo, fucsia, verde oscuro, naranja, verde clarito… para eliminar los excesos y desintoxicarnos. Un poco de magia a la carta, y ¡tachán! como si los excesos no hubieran existido… ¿Cómo va esto?

Eliminar excesos

¡Ay los excesos veraniegos!

El organismo tiene su manera de funcionar. Hay un proceso que se llama metabolismo (aquí tenéis el artículo que escribí sobre «El metabolismo»), que es mucho más complejo que una simple operación matemática que intenta «compensar» un exceso con una reducción. Recordemos que nuestro organismo necesita aportes adecuados de distintos nutrientes (proporcionados por distintos alimentos) para poder realizar todas sus funciones correctamente. Y que los excesos no se contrarrestan a base de zumos (sí, ojalá fuera así, pero…), ni de batidos que neutralicen ni de smoothies que depuren, por muy atractiva que resulte esta idea.

Además hablando de excesos, podemos cometer excesos hasta con batidos detox. ¿Qué? ¿Cómo? Pues sí, algunos vegetales aportan oxalatos y un exceso de ellos puede favorecer el desarrollo de piedras en el rinón (cálculos renales), ¡vaya, vaya con los detox! (https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/29203127)

¿Entonces? Tan simple como volver a comer de una manera adecuada, sin cometer excesos ni tampoco cayendo en déficits. Tenéis un ejemplo en estos artículos: «Cenología: Salvemos las cenas» y «COMIDA para adelgazar o… Para adelgazar, COMIDA».

Desintoxicación

Afortunadamente, nuestro organismo dispone de sistemas de eliminación de toxinas y de autolimpieza: pulmones, piel, riñones, hígado… que hacen su trabajo.

¿Y si no funcionan bien? Pues sí, puede que no funcionen bien, pero entonces sería fantástico que unos batidos fueran la solución. Mucho me temo que si me falla el hígado, el transplante de hígado no se pueda sustituir por unos batidos.

Cura detox

Vale, vuelvo de vacaciones. Consciente de que sí, algún exceso ha habido. ¿Qué hago ahora? ¿Batidos detox? ¿O…? ¿Comida? Veamos un par de menús detox:

Menú 1: De primero, aceltox; de segundo, pechutox y de postre, narantox. Traducción: aceltox, de acelgas y detox; pechutox, de pechugas de pollo y detox; narantox, de naranja y detox. Si los batimos, el color resultante probablemente sea un atractivo verde. Si queremos el batido con un tono más rojizo podemos cambiar las acelgas por tomate.
Menú 2: De primero, lentetox, de segundo gallotox y de postre yogur naturaldetox. Traducción: lentetox, de lentejas y detox; gallotox, de gallo y detox, etc… El color de este menú en batido puede ser un no tan atractivo marrón.

Y ahora un par de menús (igual de detox que los anteriores):

Menú 1: Acelgas (puede ser también cualquier otra verdura), pollo (también otro animal), y naranja ( o cualquier otra fruta)
Menú 2: Lentejas, gallo y yogur natural. O garbanzos, salmón, manzana…

Por cierto, mucho más saciantes que cualquier batido o zumo bebido porque ¡la masticación también influye en la sensación de saciedad! He puesto 2 ejemplos de menús, pero hay muchísimas más combinaciones con verduras, legumbres, fruta, carne, pescado, pollo, huevo…

Y termino este artículo con esta frase, muy de madre, que me encanta y es aplicable a este tema tratado hoy: No es más limpio el que más limpia sino el que menos ensucia.

Como os decía al principio, vuelta a la rutina y vuelta al orden con las comidas. Ni zumitos ni superalimentos, ni beber mucha agua, ni siquiera agua con limón. ¿Que me he excedido en vacaciones? Bueno, disfrutado está. Ahora, vuelta a la rutina, vuelta al orden con las comidas.

He empezado este artículo mencionando la operación bolita. Hablando de operaciones… aquí os dejo el último artículo que escribí antes de vacaciones: «Operación… ¡antibikini! Operación… ¡trajedebaño-nobikini! Operación… ¡Sorolla!

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