Alimentando el (buen) humor

¿Sabías que lo que comemos influye también en nuestro estado anímico?

Alegría, optimismo, serenidad, sosiego, bienestar. ¿Sabías que una dieta saludable repercute de manera positiva en una mejor salud mental?

Ansiedad, irritabilidad, cambios bruscos de humor, crispación, apatía. ¿Sabías que el humor y una buena/mala alimentación están relacionados también?

Cuando hablamos de la importancia de la alimentación en nuestra salud ya sabemos que hay condiciones como la diabetes, la hipertensión arterial, trastornos digestivos, el sobrepeso… que se benefician del aporte de nutrientes que le proporcionamos a través de la COMIDA. Y además, durante este tiempo de pandemia hemos visto que el estado de nuestras defensas también sale reforzado.

Y, claro, si nuestra salud física sale beneficiada, ¿es posible que nuestro bienestar anímico dependa de nuestra forma de comer, de nuestra manera de alimentarnos?

NUTRICIÓN Y SALUD, SALUD Y NUTRICIÓN

Vamos a empezar aclarando qué es salud y qué es nutrición y la relación entre ellas.

SALUD: Según la definición de la OMS, la salud es un estado de completo bienestar físico, mental y social y no solo la ausencia de enfermedades.

A veces hablamos de salud física y de salud mental, como si fueran independientes la una de la otra. Pero no puede haber bienestar físico sin bienestar mental ni al revés porque la salud es una, nuestro organismo es un conjunto, un TODO y nuestra SALUD también es un todo. Salud solo hay una.

NUTRICIÓN: aporte y asimilación de elementos, los llamados nutrientes, que son indispensables para el buen funcionamiento, el crecimiento y el mantenimiento de las funciones vitales del organismo.

Y esos elementos/nutrientes tan necesarios vienen del aire que respiramos (oxígeno), del agua que bebemos y de la comida que comemos.

La comida que comemos

Vamos a empezar haciendo una distinción importante: no es lo mismo comer que alimentarse/nutrirse.

Comer podemos comer cualquier cosa, alimente o no, nutra o no, que no todo lo que entra por la boca y podamos masticar tiene los mismos nutrientes. Pero los nutrientes los aporta la COMIDA en mayúsculas.

Los que lleváis un tiempo conmigo, ya sea en la consulta, leyendo el blog o alguno de mis libros, sabéis que yo hago una distinción entre COMIDA y comestibles:

COMIDA es aquella que proporciona nutrientes, la que alimenta, la que necesitamos: legumbres, verduras, frutas, frutos secos, carne, pescado, huevos… (la que nace)
Comestibles, los ultraprocesados (los que se fabrican); seguramente estarán ricos pero nutricionalmente no aportan, sino todo lo contario, restan.

Esta distinción entre COMIDA y comestibles va más allá del aporte o no de nutrientes; porque, lo que no aporta, resta; es decir, si al cuerpo le metemos algo que no necesita, entorpecemos su funcionamiento, lo «ensuciamos». Así el organismo tiene que utilizar de sus propios recursos para deshacerse de esa basurilla. Como dirían las madres (me incluyo, claro), «no es más limpio el que más limpia sino el que menos ensucia». Así que, sí, los comestibles «ensucian»; además de no aportar, restan.

Ya véis, no es lo mismo comer que alimentarse. Comer puedo comer muchas cosas pero alimentarme solo me alimento si aporto los nutrientes necesarios.

Y aunque le demos suplementos, recordemos que poner el foco en nutrientes aislados es caer en el Nutricionismo (podéis leer aquí el artículo sobre qué es el Nutricionismo). Y un comestible, por mucho que se «enriquezca» no se convierte en COMIDA.

Conclusión

Lo que comemos influye también en nuestro estado anímico, en nuestra SALUD. Que las personas que llevan un alimentación saludable, basada en COMIDA, gozan de una mayor estabilidad emocional; toleran mejor el estrés, sufren menos irritabilidad, cambios de humor, episodios de ansiedad. Aquí os dejo este artículo (en inglés) en el que hablan sobre ello: «Comida basura y cerebro: cómo la dieta moderna con falta de micronutrientes puede contribuir a un discurso crispado».

Comer, alimentarse, es algo más que calmar el hambre, algo más que una cuestión de peso. ¡SALUD!

Aquí os dejo enlaces a otros artículos relacionados con el tema.