Una gran estrategia llamada..."Plato Mental"

¿Has oído hablar de la estrategia del «Plato Mental»?

Sí, sí, plato mental; que no tiene nada que ver con la «empanada mental», más bien todo lo contrario, ya verás.

¿Te han invitado a la inauguración de un negocio en el que se ofrece un picoteo?
¿En la boda a la que vas a ir como invitado hay un cóctel previo al banquete?
¿Celebras un cumpleaños a base de pintxos?
¿Tienes previsto algún tipo de lunch en los próximos días?

Cóctel, lunch, picoteo, pintxos… ya sabes, estas situaciones en las que en vez de sentarnos a la mesa a comer de plato, comemos de pie, con la mano, porciones bastante pequeñas de distintas comidas mientras hablamos con unos y con otros. Comemos y bebemos sin prestar demasiada atención a lo que nos llevamos a la boca. «¡Ummmm! Este pintxo está muy rico; y este, ¡vaya, no tanto!, a ver qué tal este otro…»

En estas situaciones nuestra atención está dividida; entre elegir si cojo este pintxo o mejor este otro, entre mantener el hilo de la conversación y saludar a ese amigo que hace mucho que no ves, entre hacer equilibrios entre el canapé de turno, la copa y la servilleta, lo más probable es que al final no tengamos noción de si hemos comido mucho, poco e incluso ni recordemos lo que hemos comido; o sea, al final lo que tenemos es una tremenda confusión.

Plato mental

¿Quieres una sugerencia para evitar esa empanada mental?

Recurre a los 4 puntos de la estrategia del plato mental justo antes de empezar:

imagina un plato
dibújalo en tu mente
pon en él un surtido de pintxos, canapés, pastelitos… así, los ves todos juntos, a la vez
según comas uno de verdad, vete quitando otro de ese plato figurado

Ya verás cómo esa referencia de haber visualizado todos juntos desde el principio te ayudará a evitar la dichosa empanada mental.

Aquí te dejo otros artículos por si además te entra el sentimiento de culpa, el remordimiento o se te ocurre «compensar»: