Otra razón más para dejar de pesarte tanto

Lunes: «¿¿¿¿Qué???? ¿¿¿¿Cómo es posible????»

Martes: «Bueno, menos mal que ya no es tanto»

Miércoles: «Mejor. Voy bien»

Jueves: «Ya casi casi estoy»

Viernes: «Hoy qué bien. ¡Qué alegría!»

Sábado: «¡Vaya! Con lo bien que iba ayer»

Domingo: «Puffff, hoy paso de pesarme»

Lunes: «¿¿¿¿Qué???? ¿¿¿¿Cómo es posible????»

Y así, en bucle. Semana tras semana.

Corta el bucle

Total, prácticamente el mismo peso el día del horror (los lunes) y prácticamente el mismo peso el día de la euforia (los viernes), mientras sigues atrapado en ese bucle: lunesquécómoesposible, martesbuenomenosmalquenoestanto, miércolesmejorvoybien…

Corta. Corta. Corta. Corta el bucle.

Comparar peras con peras y manzanas con manzanas

Cuando yo iba al colegio uno de los mensajes que calaron con fuerza en mi cabeza fue: para sumar, restar o comparar algo, todo tiene que estar en las mismas unidades. Es decir, no puedes sumar 3 metros y 3 centímetros. O lo pones todo en cm, que serían 303 cm o lo pones todo en metros, que serían 3,03 metros.

Ni tampoco comparar manzanas con peras ni peras con manzanas aunque todas sean frutas.

De la misma manera que no podemos comparar el peso de un viernes después de cuidarme toda la semana con el de un lunes después de un fin de semana de aperitivos y comidas; ni el peso de antes de desayunar con el de después de comer, ni el peso de sin nada de ropa con el de con pantalón de pana, jersey de lana y botas.

El peso, una vez por semana

Por eso, si quieres adelgazar, pésate solo una vez por semana, en las mismas condiciones y en la misma báscula. Por ejemplo, los miércoles por la mañana justo antes de entrar en la ducha. Y el siguiente miércoles, y el siguiente miércoles… Da igual el día que elijas, pero que sea siempre el mismo.

Me gustaría recordarte que, como esto de pesarse a menudo es un tema muy recurrente en la consulta he ido escribiendo diferentes artículos sobre el peso y la conveniencia de no pesarte a diario. Aquí los tienes: