¿Por qué cambian tanto las recomendaciones nutricionales?

¿Reina la confusión?  Los nutricionistas hoy recomendamos los huevos, el pescado azul, el aceite de oliva… cuando hace unos años había que restringir su consumo y se decía que eran lo peor. Parece que hoy se dice una cosa y mañana la contraria. ¿Realmente es así?

Normalmente los estudios que copan los titulares de distintos medios no especializados no merecen la más mínima atención para los nutricionistas (metodología dudosa, financiación en entredicho, conclusiones dirigidas…).

La nutrición es una ciencia que en los últimos años está avanzando mucho (estudios mejor diseñados, con mayor número de participantes, a más largo plazo…). Es por eso que nuevos conocimientos requieren una adaptación y en ocasiones una revisión de los consejos nutricionales. Esto no quiere decir que cada nuevo conocimiento invalide todo lo anterior. Pero, parece que la confusión prevalece.

¿Y en qué punto estamos ahora?  El pasado Noviembre se redactó un documento de consenso entre 20 autoridades en el campo de la nutrición de diferentes países. En él se reflejan los puntos de consenso (que son muchos) para que una dieta pueda considerarse saludable sobre todo para prevenir algunas enfermedades cronicas:

Comer sobre todo vegetales, granos, frutos secos, frutas, legumbres; también, pescado, lácteos, huevos y algo de carne…combinadas de una manera flexible teniendo en cuenta las particularidades de cada individuo así como las propias de cada lugar, cultura, pero sobre todo: huye de azúcares refinados y grasas trans, o sea, de los procesados.

Hay muchas formas de alimentarse (dieta mediterránea, vegetariana, nórdica, paleodieta…) pero una sola de nutrirse y todas pueden ser buenas si aportan al organismo los nutrientes necesarios.

Simplificando: Cuantos menos procesados más saludable.

Aquí podéis leer (en inglés) el documento del consenso que he mencionado antes